domingo, 14 de agosto de 2016

Pesimismo y deficiencias ante el mercado laboral

El titular de la noticia (El Mundo, 11/08/2016) es llamativo


y la primera estadística lo fundamenta:

pero siempre se verá como lógico: con las tasas de desempleo (el juvenil  en torno al 50%) que tenemos en España, ¿quién va a ser optimista?

Los lectores comentan que sorprende la segunda posición de Japón con una tasa de desempleo bajísima (3.2% en Marzo de 2016), luego habrá que pensar en exigencias del propio mercado laboral más que en escasez de oferta.

Bueno, pues a eso me voy a referir porque lo que me ha llamado mucho más la atención de esta noticia es el apartado de habilidades y competencias. 

Aunque son conscientes de que no lo van a tener sencillo, un 67,5% de los jóvenes españoles asegura tener las habilidades y competencias necesarias para trabajar en el futuro. Algo que también piensan en mayor medida los chicos y chicas alemanes (89,1%) y los estadounidenses (82,3%). 

Con respecto a nuestros homólogos germanos, un 22% más se consideran bien preparados conseguir ese primer empleo. Es un tercio más, pero lo que me termina de sorprender es qué competencias creen nuestros jóvenes que necesitan mejorar:


Me llama poderosamente la atención que las competencias que son más críticas para el desempeño laboral son para nuestros jóvenes las que menos considera que deba mejorar, con diferencias con la media de los otros países que alcanza en algún caso los 15 puntos. Fíjense qué datos se presentan en las competencias "Hablar en público", "Trabajo en equipo" y "Solución de problemas". Creo que son reveladores.

¿Bien preparados los españoles o desconocimiento de las necesidades reales del desempeño laboral?

Pues desde mi modesto punto de vista, creo que es desconocimiento. Motivado principalmente por la falta de experiencia, hecho que si se refleja en la encuesta.  Pero la falta de experiencia es una demanda propia del trabajador novel, luego es una sensación de déficit muy natural. 

Idioma es nuestro talón de Aquiles estructural, y hay una consciencia general de nuestras carencias. Según el Índice EPI de dominio del Inglés, España en 2015 ocupaba el puesto 26 de 70 países, 19 de los 27 de UE, con un puntuación de 56,8, y con una distribución por regiones como sigue en este gráfico:


Alemania ocupa el lugar 11 de 70, pero al compararlo con España nos salta este dato demoledor:

El mapa europeo nos deja a España como un país de nivel medio:

Lo que no termino de asimilar (como docente) es que no se tenga consciencia de que "Hablar en público", "Trabajo en equipo" y "Solución de problemas" son posiblemente las habilidades más importantes para un desempeño profesional.

Asumo la parte de culpa nuestra (del sistema educativo, y del superior especialmente), porque lo que si se a ciencia cierta es que nuestros jóvenes titulados no consiguen un gran desempeño en estas competencias transversales con la formación que les damos en nuestras aulas.

Nos queda mucho por hacer, y así me lo expresó nuestro ex-Rector Domenech cuando le mostré estos datos.